Diseño elegante y sonido equilibrado que chocan con problemas de conectividad y promesas pendientes en el debut de Sonos en audio personal
Sonos, líder en audio doméstico, lanzó sus primeros auriculares, los Sonos Ace en junio del año pasado. Estos audífonos prometen combinar alta fidelidad, diseño sostenible y tecnología de audio espacial. Tras su anuncio en mayo de 2024, llegaron al mercado global en junio del mismo año.
Sonos busca competir en el lucrativo mercado de auriculares premium, dominado por Sony y Bose, pero su debut se ve afectado por una crisis de integración con su propia app.
Principales características
Los Sonos Ace llegan al mercado de auriculares como un hito de innovación, fusionando el ADN premium de Sonos con un diseño audaz y sostenible. Estos audífonos ofrecen una experiencia auditiva excepcional gracias a su audio espacial y calidad lossless, que elevan cada nota, podcast o película a un nivel de inmersión inigualable.
Con una construcción ligera pero robusta, detalles metálicos y almohadillas de cuero vegano, su estética minimalista en colores Negro y Soft White complementa cualquier estilo, mientras que su estuche de viaje reciclado refleja un compromiso genuino con el medio ambiente.
Con cancelación activa de ruido (ANC) y la prometedora tecnología TrueCinema —próxima a llegar— promete transformar espacios cotidianos en salas de cine virtuales.
Con hasta 30 horas de autonomía y carga rápida que recupera 3 horas de uso en solo 3 minutos, los Ace están diseñados para acompañar ritmos de vida intensos sin comprometer la comodidad.
Sonos Ace: una promesa de excelencia con algunos pequeños tropiezos iniciales
Sonos es sinónimo de audio doméstico premium, ha dado el salto al competitivo mercado de auriculares con los Sonos Ace, un modelo que busca combinar la alta fidelidad con diseño y sostenibilidad. Tras probarlos durante una semana, aquí mi análisis detallado.
Diseño y comodidad, elegancia con conciencia ambiental
Los Ace destacan por un diseño minimalista, con almohadillas acolchadas en cuero vegano y una banda ajustable que se adapta cómodamente a cualquier cabeza. Los acabados mate en Negro (el que probé) y Soft White, junto a detalles metálicos, transmiten premium sin excesos. El estuche de viaje, fabricado con un 75% de fieltro reciclado, refleja el compromiso ecológico de la marca. Eso sí, aunque plegables, sus 312 gramos los sitúan en la categoría de peso medio-alto, algo perceptible en sesiones largas.

Sonido, fidelidad pero con graves discretos
El audio espacial y lossless cumple: la nitidez en voces y agudos es impecable, ideal para podcasts o géneros como el jazz. Sin embargo, los amantes de los graves profundos (característica emblemática en equipos como la barra Sonos Arc y una de mis favoritas) notarán que esta vez son mucho más suaves. Los Ace priorizan el equilibrio sobre la intensidad, lo que puede decepcionar a quienes buscan un “punch” más contundente en géneros electrónicos o hip-hop.

La tecnología TrueCinema, prometida para actualizaciones futuras, aún no está disponible. De implementarse bien, podría rivalizar con sistemas como Dolby Atmos en auriculares, pero por ahora es una incógnita.
Cancelación de ruido, buena pero…
El ANC bloquea eficazmente ruidos constantes (tráfico, ventiladores), aunque queda por debajo de referentes como los Sony WH-1000XM5 o Bose QuietComfort Ultra en entornos con sonidos agudos o conversaciones cercanas. El modo Ambiente, en cambio, es natural y útil para mantener conciencia del entorno sin sacrificar claridad.

Batería y conectividad duradera
Las 30 horas de autonomía son un acierto, y la carga rápida (3 minutos = 3 horas) salva emergencias. No obstante, la experiencia se empaña con la conectividad: el emparejamiento Bluetooth 5.4 fue irregular en dispositivos Android, y cuando traté integrarlos a la app de Sonos, resultó ser una tarea frustrante, algo inusual para una marca conocida por su integración fluida. Las instrucciones, aunque simples, no guiaron adecuadamente para resolver estos fallos.

Un debut sólido (con margen de mejora)
Los Sonos Ace son una apuesta valiosa para quienes priorizan audio balanceado y diseño sostenible, pero aún cojean en aspectos clave: graves suaves, ANC no líder y problemas de software iniciales. Su precio de $449 USD los sitúa en un segmento competitivo, donde rivales establecidos ofrecen experiencias más pulidas.

Si Sonos optimiza su app y afina el sonido con futuras actualizaciones, los Ace podrían consolidarse. Por ahora, son una opción recomendable… con paciencia incluida.
Puntuación: 7.5/10
Lo mejor:
- Sonido claro y espacial.
- Diseño premium y ecológico.
- Batería larga con carga rápida.
Lo mejorable:
- Graves menos intensos de lo esperado.
- Emparejamiento y app problemáticos.
- ANC no es el más potente del mercado.
Sonos Ace un debut audaz con retos por superar
Los Sonos Ace llegan como una declaración de intenciones: llevar el ADN de la marca al mundo de los auriculares. Tras probarlos, es evidente que la apuesta por un sonido equilibrado y un diseño sostenible es sólida, pero no exenta de altibajos.
El audio, aunque nítido y espacial, deja un vacío para los amantes de los graves profundos, un sello distintivo, desde mi experiencia en otros productos Sonos. La cancelación de ruido cumple, pero no redefine el estándar, especialmente frente a rivales con años de experiencia en ANC. El diseño, por su parte, es un acierto: ergonómico, elegante y con un empaque eco-friendly que refleja la filosofía de la marca.
El talón de Aquiles está en la experiencia de software. Los problemas de emparejamiento y la integración deficiente con la app de Sonos son obstáculos inesperados para una compañía que presume de ecosistemas fluidos. Estos tropiezos, sumados a un precio de $449 USD, plantean dudas frente a alternativas más consolidadas.
En definitiva, los Ace son una propuesta valiente que necesita afinar detalles. Si Sonos escucha el feedback y optimiza su software, podrían convertirse en referentes. Por ahora, son una opción para quienes priorizan diseño y sonido balanceado… siempre que estén dispuestos a navegar algunos inconvenientes iniciales.
Si logran resolver los problemas de software y expande la integración de los Ace, podrían convertirse en un referente. Por ahora, son un recordatorio de que incluso las marcas más respetadas deben priorizar la experiencia del usuario sobre la innovación apresurada.
Cuando una marca hace las cosas bien, se le tiene aprecio; es por eso que aunque lso Ace no son perfecto, si los compraría.