Emprender siempre es complicado, pero el uso de las tecnologías lo está haciendo más cercano y cada vez menos complejo, sin embargo, un negocio, una idea o un producto que se está creando siempre necesita de una inyección de capital para que la empresa comience y desde hace años, tener acceso a dinero siempre ha sido un reto.
Los métodos tradicionales de financiación siempre han sido el ir con posibles inversores, dar tu idea, venderla y esperar que aquellas personas les guste tu idea y estén dispuestos a financiarla a cambio de una ganancia, también está la opción bancaria, así como empresas dedicadas al préstamo, pero esas toman mucho tiempo.
Foto por The New York Public Library en Unsplash
Si bien es cierto que la transformación digital ha impulsado muchos de los procesos que hacemos, una de las que más han cambiado, son las opciones financieras con tecnología, pues no solo llevaron a lo digital lo que hacen los bancos, sino también crearon nuevas formas de mover, invertir y prestar el dinero.
Obtener dinero, siempre se ha podido a través de préstamos y con el uso masivo de internet, también los préstamos en línea son cada vez más comunes, de ellos existen diferentes variedades, desde la versión clásica hasta las opciones que a través de un algoritmo, en donde se lee información de tus ingresos y gastos, para que ofrezcan cierta cantidad de dinero.
Pero una de las variantes que cambió la forma en la que vemos los préstamos es el Crowdfunding, (Micromecenazgo, como se le llama en español), pues no deja que el préstamo provenga de una sola persona o institución, sino que impulsa la colectividad de préstamos entre distintas personas para un mismo proyecto, algo así como cooperar para un proyecto.
Todo esto es gracias a plataformas creadas específicamente con este fin, ya que a través de ellas es como se logra recaudar dinero. Digamos que la empresa, empresario, idea o producto es publicada en la plataforma y cualquiera puede ir a “donar” cierta cantidad para que el proyecto salga a la luz; eso sí, buscando una recompensa por la donación.
El reto principal del crowdfunding es que la idea debe enamorar, pues el creador del proyecto tiene que explicar su idea a través de fotos, videos y texto, proporcionando la explicación esencial del proyecto, los posibles beneficios y las perspectivas comerciales. Mientras que los interesados pueden apoyar con cierto monto para que se llegue a la meta.
Por lo general, las plataformas de este tipo se financian al cobrar una tarifa por las campañas financiadas con éxito (un pequeño porcentaje de los fondos recaudados). Así que mientras más campañas exitosas tenga, más ganancias para ellas, pero también, se convierte en una plataforma famosa en donde se pueden encontrar cientos de ideas.
Las ventajas sobre los créditos, es que las plataformas de crowdfunding permiten a los creadores de proyectos llegar a todo el mundo con mucha más facilidad, encontrar contribuyentes que participen activamente en sus ideas, así como hacer posible la obtención de financiación al tiempo que se comercializan los productos y se ganan clientes potenciales.
Qué ganan los que aportan
No todo es buena voluntad, pues aquellos que aportan están esperando recibir algo a cambio, que usualmente es un producto a un precio más barato. Pero hay distintos beneficios y se podría calificar a la industria en cuatro distintos tipos dependiendo las bondades de cada uno.
Foto por Sharon McCutcheon en Unsplash
La que se basa en la recompensa. En esta forma de financiación, el autor del proyecto hace una presentación a los inversores y a cambio de la inversión ofrece algún tipo de premio. La recompensa puede ser mercancía, un producto de edición limitada, un acceso especial, la mercancía a un precio especial y otras ideas.
En estos casos, usualmente depende la cantidad que se aporta para la recompensa que se obtiene. Aquí es importante destacar que todos los que utilizan este tipo de recompensas conservar sus derechos de propiedad intelectual: patentes, derechos de autor y marcas comerciales.
Otra de las formas de financiamiento es el capital social. Aquí se ofrece a los inversores acciones de su empresa, por lo que es un método típicamente utilizado por las empresas de nueva creación. Aquí, las empresas de nueva creación deberán publicar los detalles de los acciones que ofrecen a los posibles inversores como la cantidad de fondos que se pretende recaudar, el precio por acción, el porcentaje del capital social y más datos.
Aquella que se basa en el crédito. Aquí la plataforma de crowdfunding permite a un individuo solicitar un préstamo sin garantía y, si es aceptado, toma prestado dinero de la comunidad de la plataforma y se compromete a devolverlo con intereses. Los que prestan su dinero, reciben a largo plazo los intereses que se pagaron por aportar su efectivo.
Finalmente está el de donaciones y como el nombre sugiere, el dinero se da en forma de donación. En este, no se obtiene una participación de propiedad, recompensa ni hay una promesa de reembolso al contribuyente. Dado el sistema de no recompensa, típicamente hay un elemento social o caritativo en el proyecto en cuestión.
El Crowdfunding en América Latina
De acuerdo a un informe del Centro de Finanzas Alternativas de Cambridge (CCAF), en Latinoamérica el crowdfunding superó las ganancias de los mil millones de dólares durante 2018. Un 173% más que el 2017 y dando un crecimiento exponencial del 147%, según el informe.
Foto por Jason Briscoe en Unsplash
Eso sí, los mercados más crecientes suceden en México, Colombia, Brasil, Perú y Argentina, y esto tiene sentido porque estos países son los que han regulado esta industria en leyes, lo que da las bases para que el mercado se siga expandiendo, pero también que haya menos fraudes y la gente confíe mucho más al invertir.
En el mercado Latinoamericano existen diversas plataformas para sumarte, como lo es Idea.me que se originó en Chile y ostenta la mayor “experiencia en Latinoamérica que conectada a emprendedores que necesitan dinero para financiar sus ideas, con colaboradores que aportan pequeñas sumas de dinero para hacer iniciativas posibles y recibir una recompensa a cambio”.
En Colombia existe a2censo, cuyo objetivo es “simplificar el mercado de valores”, conectando oferta y demanda de recursos de inversionistas hacia las empresas, eliminando “barreras que estaban a la mitad de los intermediarios”. En su página señalan que si eres una empresa colombiana, tendrás la oportunidad de financiarte a través del mercado de valores de La Bolsa de Valores de Colombia.
En México Donadora es la más conocida, aunque está encaminada más a las causas sociales o como un espacio para donaciones, como su nombre lo indica. La página fue fundada en 2016 y de acuerdo a ellos, han recaudado más de 239 millones de pesos (aproximadamente unos 12 millones de dólares) y en ella se han publicado más de 6800 campañas, así como la participación de más de 527 mil donadores.
Como ves, el Crowdfunding puede apoyar muchas causas y mover el dinero de distintas formas, pero en esencia es el mismo: que muchas personas aporten una cantidad razonable para un proyecto y a su vez reciban un beneficio, ya sea tangible o intangible.
Fuentes y referencias:
- https://www.jbs.cam.ac.uk/wp-content/uploads/2020/12/2020-ccaf-global-covid-fintech-market-rapid-assessment-study.pdf
- https://www.inc.com/guides/2010/04/using-kickstarter-for-business.html
- https://static1.squarespace.com/static/57b1e6dc4402434846ee1d7a/t/5b720108aa4a99ccde75a8aa/1534198044969/LATAMFINTECHREGULATION-ES.pdf