Una aplicación es un programa informático desarrollado para permitirle al usuario llevar acabo tareas. Por ejemplo escribir un libro, para esto utilizaría un programa para procesar textos como Microsoft Word o Writer de LibreOffice.org. Este tipo de aplicaciones se denominan de escritorio, pero en la actualidad cada día se usan más y más aplicaciones web.
Para muchos usuarios, una vez instalado el sistema operativo, sólo tienen que abrir el navegador web para tener acceso a las aplicaciones que usan para hacer su trabajo.
Pero…¿qué son las aplicaciones web? Son aquellas que están alojadas en un servidor web y que el usuario las utiliza desde el navegador. Ejemplos: Google Docs, Hotmail, etc.
Principales ventajas de las aplicaciones web:
Se acceden desde cualquier dispositivo con conexión a Internet
En los tiempos que corren se incluyen además de las computadoras: televisores, consolas de video juegos, smartphones, tables, etc.
Los datos están disponibles desde el momento que la aplicación está cargada
Por ejemplo, con sólo cargar por Google Docs, ya tenemos accesos a todos los documentos que tengamos allí alojados. Lo mismo aplica a muchos otros tipos de aplicaciones, pero el ejemplo más sencillo son los WebMails como Hotmail y Gmail por nombrar algunos de los servicios más populares.
Acceso a la última versión de la aplicación web
Como la aplicación se carga cada vez que se usa, siempre estamos usando la última versión, es decir, la versión con la funciones más nuevas y mejoradas.
Son más seguras porque se ejecutan en el espacio de una navegador web
Con la aplicaciones web no hay que pensar en antivirus, porque estas no puede afectar otras aplicaciones porque corren exclusivamente en un navegador web, sea este de escritorio o móvil.
Además:
- Son muy económicas.
- Utilizan menos recursos que sus hermanas de escritorio.
- Son multiplataforma
Corolario
Desde que aparecieron las tiendas de aplicaciones como la iTunes, la Mac App Store entre muchas otras, los usuarios se han acostumbrado a descargar las aplicaciones de sus sitios web favoritos. Ahora navegadores avanzados como Google Chrome, permiten instalar aplicaciones dentro del navegador. Estas utilizan la misma tecnología con que se desarrollan las aplicaciones web y los desarrollos más avanzados ya funcionan fuera de línea (offline).